Este paisaje natural en la selva peruana rinde culto al café y a una peculiar forma de obtener
Por Iván Claros
En el corazón de la selva central a más de 1800 msnm encontramos un destino donde podrás escaparte de tu rutina del día a día y a la vez aprenderás sobre los orígenes de uno de los cafés más caros del mundo.
El Parque Nacional de Café, está ubicado en Chanchamayo, Junin. Con una extensión de 40 mil hectáreas, 6 mil familias cafetaleras divididas en 17 anexos trabajan estos granos en el centro poblado de Sanchirio Palomar.
Uno de los productos emblemáticos de esta región es el famoso café Misha, que es elaborada por los coatíes (Mishashos). Cuando las cerezas de café maduran, su color rojo intenso, pulpa dulce, atraen a muchos animales salvajes, incluido el Misha, que solo se alimenta de las mejoros granos. El café luego pasa al sistema digestivo del animalito, y debido a que el Mishasho no es capaz de digerirlo, es liberado en las heces de este animal. A través de un proceso cuidadoso, las cerezas son lavadas y secadas en bandejas de acero inoxidable en un solar deshidratador, para luego ser molidas, eliminando así la segunda capa o pergamino. Una vez completado este ciclo, el café está listo para tostar y moler.
MÁS RUMBOS:
En un recorrido por el Parque nacional de café donde disfrutamos de una hermosa naturaleza y aprendemos más sobre la cultura cafetera nos hacemos ciertas preguntas como ¿Cuál es la diferencia entre el café regular y el café Misha? ¿Y por qué es tan caro?
No deja de sorprender el proceso para obtener uno de los cafés más exquisitos del mundo. Sin embargo, siempre se puede conocer más: cuando los granos están en el sistema digestivo de los Mishashos, el ácido gástrico proteolítico filtra y corta las pulpas, y el contacto con péptidos y amino ácidos da como resultado un café menos amargo que tiene un aroma intenso que perdura en el paladar y la lengua.
Hay que resaltar que el coatí no se alimenta solo café, lo hace también de varios tipos de frutas y vegetales. Estos aromas impregnan el núcleo del grano, convirtiéndolo en un producto sumamente delicioso.
Después de un largo recorrido por el Parque Nacional de Café realizando una pequeña caminata de tan solo 30 minutos y a 45 minutos de la Merced, encontramos un nuevo destino turístico, la maravillosa Catarata de Tarzán, donde se podrá respirar un aire puro, disfrutar de un buen baño y tomarse maravillosas fotos junto a la familia, pareja o amigos.