Un pequeño bosque de la Universidad Nacional Agraria La Molina, levantado por estudiantes y docentes, podría ser cercenado en medio de protestas y suspicacias que obedecen a un Plan Maestro presentado por las propias autoridades de la universidad.
Por estos días ocurre una disputa entre el rectorado y profesores de la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM). El motivo: las resoluciones rectorales que ordenan destinar 7 hectáreas del Vivero Forestal para implantar pozas para acuicultura e invernaderos. La disputa se centra en los árboles que se talaran para implementar esos espacios y que los profesores de la Facultad de Ciencias Forestales ha estimado en al menos 1500, es decir , según los docentes, se traería abajo un tercio del àrea que alumnos y profesores han reforestado desde hace 20 años.
El Vivero Forestal que ocupa 25 hectàreas del campus de la universidad, es el objeto del encono que ha motivado a profesores y alumnos a una lucha por la defensa del pequeño bosque que alberga no solo árboles( especies en peligro de extinción en el país pero aquí se mantienen protegidas) sino que ademàs es hogar de especies de flora y fauna bajo amenaza si se llegase a concretar los planes del rectorado.
La poza de acuicultura, que ocuparía 2 hectáreas, y el invernadero que contempla ocupar 7 hectáreas son proyectos que están incluidos en el plan maestro 2020-2030 presentado por el rectorado de la UNALM. Hace unos días el rector de esta casa de estudios, Enrique Flores Mariazza, declaró en un medio televisivo que no se talaría ningun árbol del vivero forestal, pues según el mapeo del rectorado el vivero forestal solo cuenta con cuatro hectàreas y no las 25 que alegan los docentes.
Según las declaraciones de Flores Mariazza los proyectos se encuentran en fase de ejecución y cuentan con el aval de los Ministerios de Economía y de Educación. Pero para el recién electo decano de la Facultad de Ciencias Forestales, Jorge Chavez, el tema tiene que ser revisado: “ ¡5 hectáreas, 50 mil metros, para hacer un invernadero! es un exceso. Venimos recuperando estos terrenos desde hace 20 años, con la instalación de este arboreto se han protegido estos terrenos de las invasiones, hemos construido infraestructura de regadío, y por eso se nos hace muy injusto que de pronto sale un plan maestro y quieren descuartizar nuestro vivero”
La Universidad Nacional Agraria tiene dividido en tres partes su campus y es en el campus número 3, donde está instalado el vivero, que se ubican 20 hectáreas de este y unas cuantas más se completan en el campus dos. Para el rectorado eso no es así : el vivero solo ocupa cuatro hectáreas y por eso aseguran que las pozas e invernaderos de las facultades de Pesquería y Agronomía no afectarán el terreno ganado por los árboles. “Pero, ¿acaso todos estos terrenos no son del Estado? – reflexiona Chávez- no existe una lotización que diga hasta aquí es de Forestales, o hasta aquí de Agronomía”. Sin embargo, el decano de forestales menciona de la supuesta existencia de un documento en el que se asignan 4.4 hectáreas al vivero forestal. “Cuando teníamos esas hectáreas, se presentaron amenazas de invasiones a todos los terrenos colindantes a la universidad y fue entonces que comenzamos a plantar arboles ”
La respuesta de la comunidad universitaria y en particular de la Facultad de Ciencias Forestales a las invasiones fue la arborización. Para cuando los traficantes de terrenos rompieron los muros y quisieron lotizar ya había árboles sembrados y con ello se consiguió que la fiscalía detuviera la apropiación por la presencia de estos. Desde entonces y por 20 años los forestales de la UNALM han sido los centinelas de que el campus no pierda ni un centímetro cuadrado más y le han otorgado un espacio verde a la ciudad.
No solo eso sino que además aquí se resguarda el material genético de árboles como la Caoba y el Cedro, ambos casì ya extintos de nuestras selvas pero que aquí permanecen a salvo y se quiere que este espacio de 25 hectáreas se integre al futuro Jardín Botánico de Lima. Pero otro tipo de preocupaciones se ciernen sobre este espacio y es el tipo uso. “La zonificación a la que obedecen estos predios de la UNALM es de uso agrícola,- menciona Chavez-, los invasores, interesados en ocupar este espacio- que hoy ocupa el vivero-, pedían el cambio de zonificación a uso urbano. Si se construye infraestructura, en este espacio, le daremos un motivo a esos mismos invasores para solicitar el cambio de uso, y se podría generar el riesgo de ocupación nuevamente”.
El rector ha mencionado que ya se vienen ejecutando algunas acciones del Plan Maestro, sin embargo, el Consejo Universitario, recién aprobó dicho plan este 27 de diciembre pasado con el voto del rector , vicerector, el decano de pesquería, el director de la escuela de postgrado y un representante de los egresados. Un cònclave contra el tiempo, han estimado los docentes de forestales y que exigen que este plan aún se someta a la Asamblea Universitaria para que sea ratificado.
En tanto ya se ha solicitado que el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) se pronuncie sobre la intangibilidad de las especies de árboles que se mantienen en esta zona: “Este es un espacio único en Lima” dice Chavez. El nuevo décano sabe que la tiene complicada, más aún en una ciudad donde a las autoridades les importa más cubrir de cemento cualquier espacio y ven en las áreas verdes un obstáculo para el avance urbano.
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