Ingresan y se apropian de zonas intangibles aprovechando los feriados o los fines de semana. Pobladores denuncian que mafias de terrenos tienen en la mira a la zona del Circuito Turístico de Lomas de Paraíso.
Durante la Semana Santa de este año un grupo de personas tomó posesión del territorio de lomas de Paraíso ubicado en la localidad, Edén de Manantial, en Villa María del Triunfo. Dichas zonas invadidas llevan el nombre de Casa Huerto y Ampliación Mina de Agua y en esa porción de tierra donde la naturaleza se alza, la mafia de terrenos quiere pulular libremente.
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Según la denuncia a través de un comunicado, Noe Neira, vicepresidente de Asociación de Lomas del Paraíso, esas personas tomaron posesión del espacio de manera ilegal: “No son personas que necesiten de vivienda sino personas que trafican con un área natural considerado único pulmón verde del distrito”, se lee en la correspondencia.
El asunto en cuestión es que, precisamente, la zona invadida también forma parte de la ruta que la Asociación Circuito Eco turístico Lomas de Paraíso, atractivo que se viene promoviendo desde hace unos años atrás, perjudicando la labor que los vecinos han realizado con tanto esfuerzo.
De acuerdo a lo reportado por los pobladores, un grupo de personas invadieron las Lomas de Paraíso, que como ya apuntamos, está cerca a la ruta en la que la Asociación Circuito Ecoturístico Lomas de Paraíso realiza los guiados.
La toma de terrenos y la instalación de esteras y carpas fue a primera hora de la mañana. La dirigencia de la zona invadida y de la asociación actuaron de inmediato, llamaron a las autoridades locales y metropolitanas para que desalojen a los traficantes. Loss vecinos en esta localidad vienen luchando desde hace años por conservar las lomas del distrito, ya han tomado cartas en el asunto y han realizado las denuncias del caso, sin embargo, las autoridades locales no han realizado ninguna acción concreta hasta el momento.
La ciudad de Lima tiene más de 20 mil hectáreas de lomas y más de 1700 están en el distrito de Villa María del Triunfo, eso quiere decir que las Lomas de Paraíso se han convertido en los pulmones de la capital, una ciudad gris a la que hay que proteger de la contaminación ambiental y la indiferencia de su población.
En riesgo
Esta zona ecológica fue declarada en el 2013 como zona intangible por la Municipalidad de Lima, pero a pesar de esa restricción el lugar es codiciado por los traficantes de terrenos. En octubre de 2017, un grupo de pobladores captaron en fotografías a personas invadiendo las Lomas de Paraíso, en el sector de José Carlos Mariátegui. Mucho antes de 2013, antes de su categorización como área de conservación regional se abrieron caminos de trocha y se colocaron casetas como si fuesen viviendas en sector del distrito con lo que se terminaron destruyendo 24 hectáreas de todo el área de loma y dónde además se verificó la destrucción de restos de cerámica. Una de las zonas más hermosas de Lima ya viene siendo seriamente afectada por los sucesivos intentos de invasión ilegal.
Algo que preocupa a la Coordinadora Juvenil de Mariátegui (CJUM) es que los invasores han asegurado que tienen el apoyo del Municipio y por eso han pedido la colaboración de las autoridades. Sin embargo, aún no existen normas que aseguren su intangibilidad. Por ello sufren constantemente invasiones como ya ha sucedido en otros lugares como Lomas de Carabayllo, Lomas de Amancaes o Lomas de Mangomarca.
Al menos en 19 distritos diferentes de Lima, de norte a sur, se localizan estos espacios de lomas. Eso las hace el blanco de la demanda de espacio en la ciudad y el acto reflejo de escape a la presión urbana en la capital. Son la evidencia de la expansión de Lima. Debido a la fragmentación de estos espacios a lo largo de los años, una de las principales amenazas de su desaparición es la ocupación clandestina y el crecimiento informal.
Juan del Castillo del Centro Urbes, apunta que las invasiones en lomas son los espacios más vulnerados, especialmente en Mangomarca, donde actualmente hay una invasión que ya tomó las cumbres y ha destruido el 60% del ecosistema.
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