Con una contundente sopa seca, un chupe de camarones y un buen pisco, se disfruta mejor de los atractivos turísticos y culturales de Cañete, la ‘Cuna y Capital del Arte Negro Peruano‘.
Cañete en feriado patrio es un destino impecable. Los buses parten con normalidad y al llegar a esta provincia de la región Lima, son recibidos por un sol radiante casi siempre.
Un panorama ideal para los turistas que no se animan a cruzar toda la panamericana y saltar hacia uno de los extremos del país y quieran algunos remansos cercanos para este feriado fugaz: Cañete aguarda entonces.
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Cerro Azul
Si planea descansar, saborear los perfumes marinos y darse un chapuzón, Cerro Azul debe ser su próxima parada. Su tradición impregnada por el festejo -ese baile donde se necesita tener una sonrisa que contraste con la piel y moverse como un cascabel-, musicaliza cada esquina de esta localidad.
En este distrito, conocido por sus playas propicias para el surf y la pesca, podemos encontrar acantilados con aves guaneras, complejos arqueológicos y restaurantes que nos darán la bienvenida con platillos como la jalea mixta, la parihuela, el cangrejo reventado, el pollo al cilindro, además de su riquísima leche de tigre y pulpo al olivo, entre otros potajes. Ojo que es el momento del camarón en su punto, pues no hay veda.
San Luis
El folclore afroperuano en su máxima expresión. En el distrito de San Luis, la piel tostada parece ser el atractivo por antonomasia.
Y es que esta localidad ha visto crecer a varios exponentes de la música afroperuana, como Ronaldo Campos Donayre y Caitro Soto de la Colina, además de anidar las raíces de Lucila Campos, quien compuso la canción Chinchiví, en tributo a un trago típico de la cultura afroperuana.
Entre sus atractivos resalta la Casa Hacienda (Casa Blanca y Santa Bárbara), un espacio colonial de mediados del siglo XVIII. Aquí se visitan espacios administrativos, las zonas de castigo a los esclavos y los lugares donde ellos socializaban hilvanando su propia cultura, hoy respetada y admirada por todo el país.
Lunahuaná
Aventura. Así se describe Lunahuaná, un lugar donde puedes encontrar el éxtasis de un viaje adrenalínico, sin la necesidad de alejarte del clima, la gastronomía, los vinos y los piscos que solo Cañete puede ofrecer.
Actividades como canotaje, canopy, motocross y rápel, son parte de un circuito aventurero del que se podrá disfrutar por estos días, sin que las tarifas -acaso coincidiendo con la celebración- estén por los cielos. Eso no sucederá en esta tierra calurosa y querendona. Tal vez en otros lugares.
Anota que hay dos opciones de canopy que te mantendran en vilo: la corta que cruza el río y la larga que es entre los cerros. No te pierdas ninguna.
El canopy en Lunahuaná te hace volar sobre el río Cañete.
En Rumbo
* La ruta: Accesible. Hay buses para Cañete todo el día. Duración: 2 horas.
* La agencia: Contacte con Revista Rumbos
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