Hipnóticamente surcan el mar del norte en Perú, entre Piura y Tumbes. Una franja donde se ubica la porción más biodiversa del mar pacífico, y es nuestro. Ir en busca de este fascinante mamífero marino y encontrarlo es como haberse sacado la lotería de la naturaleza.
Aquí lo tienen casi todo para estar bien: aguas cálidas, comida abundante y gente que viene a verlas hasta Los Órganos, un localidad piurana que se ha convertido en lugar para el avistamiento de ballenas jorobadas. Acaba de iniciar la temporada y tenemos para un rato a esto de seguirle los pasos. Este cetáceo pasa una buena temporada explorando las costas del norte peruano y más o menos hasta fines de octubre, las ballenas jorobadas ofrecen una experiencia diferente en la magnífica costa piurana. Una opción para tener en cuenta durante el invierno en este paraíso tropical.
Nos subimos a la embarcación que parte del Muelle de Los Órganos y fuimos mar adentro en busca de las ballenas, no había mucho sol ese día, pero el entusiasmo era inmenso y no nos equivocamos.
Mar adentro se puede observar que estamos sobre aguas que forman parte de una propuesta que ambiciona proteger esta porción valiosísima de ecosistema marino del Perú y que además es el escenario propicio para los buscadores de ballenas.
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La razón del porque es un lugar predilecto para nuestras amigas jorobadas es sencilla. La costa norte del Perú, en Piura, tiene la influencia de la corriente de El Niño, el mar es caliente y las ballenas jorobadas se desplazan cercanas en la zona de la línea ecuatorial, en busca de aguas más cálidas, aquí las encuentran. Pero como además, esta condición supone un mar rico en materia orgánica, la costa norte del Perú viene a ser el límite del área de reproducción y crianza de las ballenas jorobadas. «Esto es una maravilla – señala Belén Alcorta de Pacific Adventure, porque estas especies tienen hábitos costeros y eso hace que las podamos ver y no tener que ir tan lejos, mar adentro. Las ballenas jorobadas son una especie que hace mucha actividad en superficie en sus zonas de reproducción y crianza, son conocidas por hacer saltos, coletazos, cantos, ponerse en grupos de competencia con otros machos» .
De repente y en medio del océano una ballena jorobada con un acto de reverencia, hace su aparición ante nuestros ojos y asombro. Su enormidad termina sepultada en un instante debajo del agua y solo queda su enorme cola sobre las aguas,agitándose como si estuviera saludando a quienes lo observamos, pasarán 15 minutos para que vuelva a la superficie porque necesita respirar.
Al menos a 8 kilómetros mar adentro de la playa Punta Veleros, distrito de los Órganos, en Piura, sucede este espectáculo que atrae en invierno y deja atrás la diversión de las olas y la noche que ofrece Máncora en verano. Como ven, no solo el sol invita al mar. Pero para nuestra sorpresa, una manada de tres ballenas macho ha buceado bajo nuestra lancha de izquierda a derecha, antes de salir a respirar y pasarán 15 minutos para que vuelva a la superficie porque necesita respirar varias veces.
Una enorme sombra brota bajo el mar, seguida por un chorro de agua expulsado con vehemencia del lomo del cetáceo. Luego de nadar calmadamente unos minutos, dejando al descubierto su aleta dorsal y parte de su joroba, esta se curva prominente antes de sumergirse y mostrar la cola. Nosotros no salimos del asombro ante tanta majestuosidad.
Las ballenas jorobadas pueden ser identificadas individualmente gracias al patrón de coloración de la cara ventral de la cola. Cada ballena tiene un patrón de coloración único y, al igual que la huella digital de un ser humano, dura toda la vida.
Seguimos navegando y ya sólo queremos encontrar más grupos de ballenas a los que seguir durante unos metros que por cierto es obligado guardar la distancia de al menos 100 metros entre la embarcación y nuestras amigas. El recorrido nos enseña que no son los únicos habitantes de estas aguas, delfines y tortugas comparten territorio con ellas, también las aves y como en un safari completan la lista de la fauna marina de la que disfrutar. Paisaje y vida animal se conjugan en una experiencia natural fuera de serie.
Cuando nos acercamos al muelle de Los Órganos, una vez transcurridas las horas de navegación, la sensación de que el tiempo ha pasado a toda velocidad es un hecho. Pero puede más la sensación que deja haber disfrutado de la naturaleza en estado puro y las ballenas grabadas en nuestros sentidos.
Los avistamientos de estas gigantescas criaturas se producen de julio a octubre ya que viajan 8 mil kilómetros desde la Antártida para recalar en las aguas tropicales del norte del Perú, y son la justificación perfecta para escaparse a esta región donde todo quema y todo arde, donde siempre cae bien un chapuzón en el Pacífico y los turistas se sienten los reyes del mundo frente al ida y vuelta de las olas.
Los artífices de esta experiencia, Belén Alcorta y Sebastian Silva quienes fundaron Pacífico Adventures, una empresa de ecoturismo marítimo, sí, pero que a su vez realiza investigaciones científicas sobre el comportamiento de estos cetáceos. Ella es especialista en ecoturismo y él, biólogo marino. Y, luego de observar las idas y vueltas de nuestras amigas jorobadas, están convencidos que el turismo es una herramienta para la conservación de la naturaleza.
En estos tours además se registran los avistamientos de cetáceos, y así se ha podido establecer un patrón migratorio de ballenas jorobadas en el mar peruano, información valiosa pero inexistente hasta antes de su emprendimiento, pero que además ha servido como parte del sustento técnico para la creación de la propuesta de la Reserva Nacional del Mar Tropical de Grau: «Hemos promovido la creación de la propuesta de reserva, poniendo a la orden los resultados de nuestras investigaciones sobre ballenas jorobadas y sobre las distintas especies de cetáceos que hemos encontrado en nuestras incursiones por esta zona y que son 13», señala Alcorta.
Así nació la idea más importante de Pacífico Adventures, la de financiar la investigación con el turismo, datos que han quedado plasmados en una publicación en conjunto con la Universidad Científica del Sur.
Estando en altamar, los turistas tienen la posibilidad de ver a las ballenas jorobadas –que pueden medir hasta dieciséis metros, como un edificio de cinco pisos– saltar y juguetear, como parte del cortejo previo a la reproducción. Y, desde que consiguieron un hidrófono, también se pueden oír los cantos de las ballenas que emiten una serie de gruñidos, chasquidos, silbidos, y aullidos bajo el agua, todos en baja frecuencia, ya que estos recorren más distancia bajo el agua que los de alta frecuencia.
A estas alturas del invierno, el norte no puede evocar más que días de tranquilidad en los que la única preocupación es elegir a qué playa ir o qué delicia degustar en el almuerzo. El resto fluye. Quizás eso fue lo que cautivó al escritor estadounidense Ernest Hemingway, quien inmortalizó a Cabo Blanco, una de las caletas piuranas, en su novela El viejo y el mar.
Y eso que al nobel de Literatura le faltó escribir sobre las olas izquierdas de Punta Velero, del relajo en los bungalós de Vichayito y del nado con tortugas en El Ñuro, dignas de ser observadas, pero también respetadas. También sobre la insomne Máncora, donde hoy en día el turismo de naturaleza, ha cobrado fuerza en el mercado bajo un contexto en el que los consumidores buscan alternativas para mejorar su salud, relajarse y reducir sus niveles de estrés causado por un estilo de vida ajetreado.y relax. El resto fluye. El resto se descubre.
Temporada: Ya inició y se extiende hasta fines de octubre.
Contacto: Hay que ponerse en contacto con Pacífico Adventure. Telf: 9998176199 / 940 202 243
Precio: S/ 130 . Niños S/110. Hay opciones tours privados.
Programa: El punto de encuentro es en el muelle de Órganos a las 6:45 am previa reservación. El tour de avistamiento de ballenas y el guiado por el Museo Marino donde se encuentra un esplendido Café abrirá sus puertas desde el 15 de agosto. Forma parte de la carta un delicioso café orgánico, y el especial de la casa: sándwich de atún ahumado y una linda terraza con vista al mar para disfrutarlo. Además la embarcación de Pacífico Adventures tiene un hidrófono para escuchar los cantos de las ballenas.
Incluye:
• Excursión guiada por biólogos marinos bilingües.
• Capitán experto en navegación con años de experiencia en la observación de cetáceos.
• Hidrófonos a bordo para escuchar los cantos de las ballenas en vivo.
• Avistadores en los cerros que nos ayudarán a encontrar las ballenas con mayor facilidad.
• Visita al Museo Marino de Pacífico Adventures (Abrirá del 15 de agosto al 31 de octubre).
A tomar en cuenta: Esta aventura no es recomendable para niños menores de 5 años ni adultos de edad muy avanzada ni personas en estado de gestación.
Investigaciones: El libro Ballenas en el norte del Perú, de Pacífico Adventures y la Ucsur materializa un valioso esfuerzo para acercar al público a las ballenas y su entorno. La obra, además de informar mediante rigurosas investigaciones e impactantes fotografías, revela en sus páginas la inabarcable y enigmática belleza del mundo marino.
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