Redacción Rumbos
¿El turismo podrá resistir a la pandemia global donde la mayoría de fronteras se han cerrado? Queremos ser optimistas y pensamos que sí, pero no lo hará de la manera que hasta ahora venía funcionando. En esta segunda parte de la cuarentena hay una gran incertidumbre sobre el futuro del sector y mientras esta medida se alargue crece la angustia de las empresas y trabajadores del rubro.
Entonces hay que reinventarse. El turismo representa el 10% de la economía mundial y ofrece trabajo a un gran nicho de actividades que se desprenden de él. Viajar es ya inherente a todos, ha dejado de ser un lujo, y en nuestra opinión, tal y como se presenta este desafío, recuperar la industria va a tener que pasar necesariamente por no seguir siéndolo y abrir sus puertas al viajero local con muchos menos recursos que el viajero del exterior.
Esto puede ser una mala noticia – todo depende- para esa parte del sector que apuntaba solamente al turismo receptivo. Pues no sabemos cuánto dure esta crisis mundial que va a mantener por un buen tiempo sin abrir fronteras, ya sea por el temor de los viajantes o por la seguridad impuesta por los gobiernos en el afán de proteger a su población de nuevos repuntes.
El turismo está parado y debe quedarse así hasta que se solucione la crisis de salud. Y es allí dónde empieza la preocupación. Cabe resaltar que cerca del 90% del sector turismo peruano está compuesto por pymes e independientes. La mayoría de ellos probablemente no sean sujetos de crédito y carezcan de fondos suficientes para sobrevivir mucho tiempo sin ingresos. Pero para las empresas de turismo, las mayoristas y formales, la situación también es sumamente compleja. Ya lo ha dicho Juan Stoessel, » ¿Cuánto más podrán cubrir sus gastos operativos, sin ingresos? Y para cuando pase la cuarentena los grandes países emisores permanecerán afectados por meses. Sin duda, el arribo de viajeros será mucho menor en lo que resta del año».
Varios sectores después de esto estarán golpeados. Pero uno de los que impactará a millones de personas en este país es el turismo, que en los próximos meses sus ingresos serán CERO. Agencias de viaje, hoteles, guías, choferes, transportistas, lineas aéreas, restaurantes, mercados artesanales, museos, atractivos turísticos, tiendas de servicios – y así podría seguir nombrando a muchos más.. Pocas industrias (o ninguna otra creo) llega a realmente a todo nivel como el turismo. El impacto ha sido y es brutal e inmediato. #DeEstaSoloSalimosUnidos
Posted by Mariana Watson on Wednesday, April 1, 2020
La campaña del turismo en Perú para inicio de año ya están perdidas. Es así que minimizados los casos y sorteada la pandemia, desde el gobierno se quiere promover el mercado del turismo interno. Y es natural, con todo cerrado y con el pánico instalado en todo el globo es lo primero que se tiene que reactivar. Pero el turismo interno no se va a mover sino hasta que la amenaza de contagio pase. Y es por eso que hay que centrarse en el segundo semestre del año, momento en el que, se calcula, las cosas podrían mejorar.
Pero, ¿vamos a incentivar el turismo interno de siempre, ese turismo consumista, arrasador, desordenado, abrumador y olvidarnos de las lecciones aprendidas que nos está dejando el Covid -19 ?Ciertamente es la oportunidad de cambiar y en eso hay una gran responsabilidad en el sector.
Pasada la pandemia en el mundo, y en especial nuestro país, el sector turismo tiene el deber de hacer una reingeniería, pues el temor a la pandemia dejará secuelas en los viajeros. ¿Cómo calmarlos?
Desde nuestra tribuna hacemos hincapié a la promoción del turismo de conservación y el turismo rural comunitario en especial. Creemos que la promoción turística debe olvidar por un momento a las estrellas del turismo nacional, que siempre están abarrotadas, e incidir en los destinos que dejan aprendizajes y lecciones, que nos enseñan a respetar la naturaleza y a las culturas. Las visitas a las áreas protegidas, el turismo científico, viajar para hacer voluntariados en zonas rurales debería ser lo primero en lo que deberíamos apostar e incentivar.
Ya la Asociación Internacional de Transporte Aéreo Internacional (IATA), ha señalado que los ingresos de las aerolíneas que operan en el Perú caerán aproximadamente US$1,300 millones solo en el segundo trimestre. Para apaciguar esta debacle, la bioseguridad se va a tener que volver una norma en el sector turismo y tal vez se deberán tomar exámenes a los que quieran subir a un avión, y tal vez, quizá se puedan abrir fronteras con países que casi no tengan incidencias con el virus para reinstalar el tráfico aerocomercial.
En esto el Ministro de Salud, Victor Zamora, ha sido bastante claro: “el aeropuerto y los vuelos internacionales probablemente sean lo último que se abra. Nuestros vecinos continúan con una epidemia activa y grande. Será en distintas fases, en algunas regiones más rápido o más lento.”
La promoción turística necesariamente tendrá que ser digital y ya no las clásicas ferias, viajes y stands. Habrá que minimizar costos e incentivar los viajes cortos, regionales, pues hay una gran cantidad de población local que desconoce las maravillas de su propia región, por ser estas inaccesibles. Pero también será la hora de revisar la sostenibilidad de este sector. Según los datos del Gobierno Regional de Cusco, la actividad turística aporta al PBI S/ 21 mil millones de soles a esta región, una de las más turísticas del Perú, pero buena parte de los trabajadores que dependen de esta actividad apenas si tienen un contrato y el 54% de las empresas en el ‘Ombligo del Mundo’ son informales. Es decir genera riqueza pero no le aporta seguridad, ni salud a los trabajadores.
Queda pues la valla bien alta post pandemia para las oficinas de promoción turística, de Marca País y los gremios turísticos para trabajar el plan estratégico de reactivación del sector y una campaña de promoción que anime de a pocos el deseo de viajar y de cambiar.
En mi opinión este artículo fue muy importante por que me generó conciencia ,lo que estamos atravesando hoy en día, ylo que sucederá después de esta gran lección que es el covid 19 el día nos enseñó a valor lo que poseemos y no sabemos sacarle provecho iniciando desde nuestra familia ,trabajoy lo más caótico relacionado al turismo.
Genial Artículo me proyecto el panorama futuro del turismo